lunes, 22 de diciembre de 2008

Veranito de San Juan


Esta es una denuncia pública.
El calor nos tiene medio locos, ciertamente.35 o 40 grados de sensación térmica trabajando y vestido para la ocasión(si fuera en una playa del Caribe en malla sería distinto...)enloquece a cualquiera.
Pero caminar por el centro porteño en estos días trae otros inconvenientes además de derretirse cual manteca olvidada sobre la mesada.
Esta mañana, antes de venir a la oficina, decidí hacer algunas compras de Navidad, aprovechando todavía el fresco matutino.
Caminé por Corrientes hasta Florida, rumbeando hacia Plaza San Martín.
Ya no es suficiente esquivar pozos y mirar por dónde se camina para no torcerse un tobillo (yo ando con tacos)sino que además hay que esquivar las gotitas, gotas y hasta chorros de los aires acondicionados.
Desde luego, los susodichos goteos están contra los edificios, cosa que dificulta bastante ir mirando vidrieras.
Yo me pregunto: ¿No se puede hacer nada al respecto? ¿los comerciantes venden tanto que no les importa que las personas no puedan ver sus escaparates?
Si, ya lo sé: vivimos en Argentina...

3 comentarios:

F. Fabian S. dijo...

encima te quejas, los tipos te refrescan con unas gotas de agua cristalina y no te gusta....!
Te tomaste tu tiempito para volver ,no?
Besos.

Nina Noriega dijo...

Nos falta civismo, leer la Constitución (y en el mejor de los casos) no es ejercerla.Será cuestión de arrancar por allí Nina

Patricia "La Gata Flora" dijo...

Fabián:
¿Viste? Yo soy así: No hay nada que me venga bien…

Nina:
Creo que nuestro problema es mucho más básico que leer a Constitución. Deberíamos empezar por recuperar algunos valores mínimos y aprender reglas básicas de urbanidad. No hay caso… moriré utópica.