lunes, 9 de febrero de 2009

Que demasiao

No, bolú!!! Te dije que no puedo ir con vos!!! Tengo que ir a hacer un laburito. Desde que mi viejo está adentro salgo yo. No quiero hacer como la Rosa. ¡Me da un asco cuando la vienen a buscar los tipos a la esquina! Sobre todo el gordo hijo de puta que viene los viernes. Es un baboso de mierda, pero paga bien...
¿Rosa? Es un año más grande que yo. Ya cumplió 16...
Y... sí. Se da con algo un rato antes de que venga. Dice que si no no se banca chupársela.
¿Mi vieja? ¡No! ¡Qué va a decir! Ella quiere que traiga la guita. Sino nos caga a palos.
¿Qué? ¿No te había contado de mi viejo?
¿Te acordás de la doctora que venía al dispensario y que nos ayudaba tanto? Bueno, un día le dije que mi viejo estaba sin laburo y le dijo que hiciera unos trabajos en su jardín.
Desde esa vez mi viejo se emputeció con ella.
Un día me dijo que la íbamos a afanar.
Yo le toqué el timbre, y cuando me reconoció me abrió enseguida. Y ahí nomás entró mi viejo con el chumbo.
Sacamos todo lo que podíamos. Después él se la llevó al dormitorio y me dijo "¡quedate acá!". Yo le dije que no jodiera, pero me dijo que yo no entendía nada, que los hombres tenían necesidades. ¡Podría disimular adelante mío, el muy cabrón!
Después salió y me sacó los cordones de las zapatillas y le ató las manos. Subimos a su auto y nos fuimos al campito.
La bajó y le pegó un tiro. Sí, me asusté un poco. Hasta ahora sólo habíamos afanado y algún que otro culatazo a algún infeí. Pero no fue para tanto.
Después agarró el celular de la mina y la llamó a la vieja. Le dijo que había conseguido unos mangos y que nos íbamos de compras.
¿Este? ¡No! ¿Viste que bueno está? Este se lo saqué a un flaco hace unos días en el cruce de Lomas. Lindo pibe... rubiecito y de ojos claros. Me pareció que se reía de mí, y casi lo surto. Pero el muy boludo se puso las manos en la cara y se puso a llorar. Casi hasta lástima me dió.
Unos días después cayó la yuta a buscarme y me llevaron. Mi viejo ya estaba en la comisaría. Me dijeron que si no hablaba quedaba yo también pegada... Y yo batí todo.
Y ahora salgo yo. Así que me voy, porque se de un tipo que va todos los lunes al cajero a sacar guita.
Chau, flaco. Se me hace tarde...



4 comentarios:

F. Fabian S. dijo...

Ahi va Patricia , iniciandose en el relato policial...
Interesante posibilidad para enriquecer el blog.

Nina Noriega dijo...

que buena crónica de la realidad, que triste la realidad que nos azota a la vuelta de la casa. Uff es fuerte ¿será tan difícil cambiar esta realidad? o ¿estamos conforme con ella?

Patricia "La Gata Flora" dijo...

Fabián,
Me encanta el relato policial. Como bien decís, es muy interesante desde el punto de vista sociológico.
Si bien prefiero "La Ley y el Orden" a Crónica TV, creo que reflejan una realidad en la que la Argentina no está sola.
Hay personas que tienen la teoría que la gente es intrínsecamente mala, y que si se la dejara a su libre albedrío haría estas cosas.
Yo siempre rechacé este supuesto, más por no gustarme que por razones científicas.
Pero me parece que deberé replanteármelo.

Nina,
Creo que, efectivamente, hay personas que están conformes con ella. En nuestro país hace mucho que nos vienen acostumbrando a que cada uno hace lo que se le canta sin importarle nada de los demás.
Cambiar la realidad, creo, es muy difícil, porque implica no sólo un total cambio de mentalidad sino también capacitar a muchísima gente para insertarse en la sociedad. Y no veo que se esté haciendo mucho al respecto.
Lamentablemente está basado en hechos reales. No es mi cabeza afiebrada que delira.
Hablando de otra cosa, ayer anduve por tu blog pero no me permitió hacerte comentarios. Tal vez con la lluvia los circuitos andaban en cortocircuito (ja,ja). Hoy intentaré nuevamente.
Besotes

kuke dijo...

Patricia, me gustó mucho tu blog, y me dió escalofríos esta última entrada, sobre todo porque tengo bastante contacto con chisco que hablan así, y hasta viven o vivieron situaciones parecidas y usas totalmente su jerga.
Saludos, y pasaré a leer más seguido