sábado, 1 de marzo de 2008

Tiempo loco




Mucho se ha dicho y escrito sobre el tiempo. Y siempre fue un tema apasionante para mí.
Leí a Stephen Hawkings (entendí sólo la mitad, la verdad sea dicha), vi cuanto documental se presentó en la pantalla sobre el tema, conozco un poco la teoría del Big Bang.
Para mi limitada mente es difícil entender un concepto sin principio ni final. Y, en realidad, pensándolo bien, todas las teorías escritas hasta ahora, medianamente sustentadas en la física y las observaciones, sólo son especulaciones metafísicas siempre al borde del precipicio de ser eliminadas.
Einstein dijo con acierto que el tiempo es relativo. O, como dijo más poéticamente Wimpi “tiempo loco de minutos enormes y años cortitos…”.
Cuando escribo sobre algún tema esquivo trato de empezar por el principio: ¿Qué dice el diccionario sobre esto? Veamos: “Por tiempo se entiende la duración de las cosas sujetas a mudanza. Es una
magnitud física que permite ordenar la secuencia de los sucesos, estableciendo un pasado, un presente y un futuro; su unidad en el sistema internacional es el segundo. Parte de esta secuencia. Época durante la cual vive alguien o sucede algo. “
Tanto pensar en eones… que no tienen mucho sentido en la limitada porción de tiempo que nos fue dada: nosotros disponemos de unos pocos años para hacer de ese tiempo una vida.
Y lo cierto es que a veces ésta parece una tarea fácil y manejable, y otras sentimos que no podremos con ella.
Cae esta tarde gris sobre las casas que muestran los destellos de las gotas que se niegan a evaporarse con el débil sol que asoma tímidamente entre las nubes. En el aire suena una música suave que denota mi estado de ánimo. A veces me pongo un poco melancólica y huiría de acá buscando nuevos horizontes porque siento que las cosas me sobrepasan. Y normalmente no se trata de problemas serios. Esos no pudieron conmigo.
Acostumbro ser una mujer fuerte. Supongo que, como a muchos, me ha tocado pasar situaciones realmente difíciles que supe superar con hidalguía.
Pero algunas veces (sólo a veces) necesito algún brazo amigo que me rodee, apoyarme en un pecho fuerte, y llorar…

9 comentarios:

La Incondicional dijo...

A mí me tortura pensar qué es lo que marca el tiempo. Porque pareciera que el tiempo es, muchas veces, una medida de magnitud de las cosas. Pero al meditarlo un poco no me parece que sea tan así.

dispersa dijo...

no es casual q empieces hablando de Stephen Hawkings,que el espacio que llamamos vacío en realidad no lo está; que los agujeros negros no son negros y una serie de paradojas...me gusta eso por q pienso q :"esas algunas veces" puedan ser una ¡¡constante!! donde se conjuguen los tiempos de apoyarte en el pecho y llorar y también reir,cuando adviertas q no es debilidad necesitar compañia,solo cuando lo quieras...Hay q aflojarle un poco al cerebro,al pensamiento ...

MIENTRAS ESO SUCEDE.. TE ABRAZO

El Doc 9 dijo...

La compañera Dispera siempre esta presente. Es una alentadora cibernètica. Oriunda de Termperly; lo ùnico que se, es que soy hinca de Boca por vocación, de Quilmes por historia y de Termperley por elecciòn, porque me cae simpàtico el club y la ciudad. beso

dispersa dijo...

ja ja ja ja ja ja �alentadora cibern�tica?..no entend� dejo en tus manos Pat la explicaci�n ..daleee vos lo haces bien..

Patricia "La Gata Flora" dijo...

La Incondicional,
No sé qué es lo que marca el tiempo. Pero sí estoy segura que la dueña de él soy yo. Por eso hace tiempo que no uso reloj. Odio los horarios, aunque deba respetar algunos.
No es fácil determinar qué marca la magnitud de las cosas. Sí es cierto que el tiempo pareciera correr más deprisa cuando las cosas nos gustan y más lento cuando no es así.
En lo que no estoy totalmente de acuerdo es en pensar que “el tiempo todo lo cura”. Tal vez minimice pero, ¿curar?
Tendré que meditar más sobre el asunto… ¡Menuda “tarea para el hogar me dejaste!

Patricia "La Gata Flora" dijo...

dispersa,
Soy plenamente consciente que hay que aflojarle al cerebro y al pensamiento.
Pero vengo de una familia en que eso siempre fue lo primordial, y me resulta casi imposible no racionalizar, lo que me trae no pocos inconvenientes.
Siempre me creí Wonder Woman, y me llevó más de 40 años entender que no lo soy, y que necesitar compañía o pedir ayuda no es debilidad sino todo lo contrario. Sólo alguien bien plantado es capaz de asumir sus necesidades.
Y siempre viene bien un abrazo en esos momentos. Gracias por eso.
Besotes

Patricia "La Gata Flora" dijo...

El Doc 9,
Ciertamente: gran alentadora cibernética es Dispersa. Y esos mimos siempre hacen bien.
Sí, es lindo Témperley. Sobre todo el barrio inglés.
Trataré de ver tu blog mañana, porque hoy tengo que ir a trabajar (esos vicios).
Muchos besos

Patricia "La Gata Flora" dijo...

Dispersa,
No hace mucho que me metí (gracias a un amigo) en esto del blog.
Es un mundo fascinante.La mayoría de nosotros no nos conocemos personalmente, pero eso no impide que vayamos conociéndonos y compartiendo alegrías y tristezas.
Y hay gente, como vos, que siempre trata de brindar su apoyo y aliento. Y los que lo recibimos siempre estamos agradecidos.
Creo que a eso se refiere Doc9 con lo de "alentadora cibernética", ¿no te parece?

dispersa dijo...

tanto halago q ni me la creo..gracias al doc y a vos.un beso