Estamos desarmando la casa de mis viejos. Aunque hace mucho que no vivo allí, es MI casa. No puedo olvidarme de las tardes de voley en la puerta, o jugar con los zancos que me había hecho mi abuelo y eran la envidia de todo el barrio (a saber: dos palos largos y dos más cortitos clavados en los anteriores y donde se apoyaban los pies. Un tesoro). Más tarde los "asaltos", con todos los preparativos previos: papel celofan de colores en las bombitas, correr la mesa para dejar espacio para bailar, elegir los discos. Y por qué no, el 1º piso, donde me besaba "escandalosamente" con Roqui, mi primer novio.
Muchos recuerdos, que se hacen más patentes con cada cosa que va apareciendo al guardarlas en los cajones.
Así que mi estado de ánimo por estos días no es muy bueno.
Teniendo ésto (y muchos otros conflictos sin resolver) en mi cabeza, me levanté el lunes temprano. Teníamos una reunión de trabajo a las 10 y debía salir rápido.
Para variar un poco llovía. Quise ponerme el piloto y, ¡Oh sorpresa!, no estaba. Refunfuñando me puse la campera, conciente que no hacía mucho juego con la ropa que tenía debajo.
Al subir al tren encendí mi MP3, y descubrí que "alguien" había sacado la pila. De cualquier manera hubiera sido inútil: detrás mío subió un vendedor con su enorme equipo que empezó a martirizarme con "los románticos de todos los tiempos". Antes de cometer un "vendedorcidio" me puse a escuchar las letras. Patéticas.
En dos canciones (distintas y consecutivas) el atribulado muchacho le cantaba a su ex novia que se casaba con otro, diciéndole que nadie la querría como él. En la tercera el cantor ahuyaba que la dama en cuestión nunca olvidaría que había sido suya. ¡Qué costumbre! ¿Por qué los tipos se piensan que cuando salimos con alguien pasamos a ser de su propiedad? Las minas no nos quedamos atrás: "Fulanita me lo robó", como si fuera la birome que dejamos sobre el banco al salir al recreo.
Pero volvamos al tema del blog. Inspirada por la "onda retro" provocada por el vendedor de CD truchos, bajé a mi computadora muchos temas que me traían recuerdos felices (y no tanto).
Algunos fueron:
All night long-Lionel Richie
All by myself - Air Suply
Ebony & Ivory - Mc Cartney Paul & Steve Wonder
California somnolienta-The mamas & the papas
Goodbye yellow brick road - Elton John & Billy Joel
¿Y a ustedes qué canciones les traen recuerdos?
10 comentarios:
Muchas. Pero hay una que no puedo volver a escuchar: Por mirarte. Lo más curioso es que no recuerdo habérsela escuchado tocar en la guitarra. Pero se ve que a veces los recuerdos son aleatorios.
Amor extraño de los Depeche Mode.
Esto seria fantastico si cada uno contara la histora de cada cancion, porque le elgimos.Yo ni loco cuento el porque de esta cancion...
Clasicos de ayer y hoy:
* Killer Queen
* Remember When
* Satisfaction
* YMCA
te quiero patri!
al final no arreglamos nada para la semana!
besotes
dani
Incondicional,
Los recuerdos no sólo son aleatorios sino también atemporales. ¿Te fijaste cuántas veces borramos algo de nuestra mente y, sin causa aparente, vuelve a apaecer cuando se le ocurre?
En mi caso en particular, la música es especialmente indicada para los recuerdos. Pero también los olores. Ya haré algún comentario al respecto.
Besos
Fabián,
¿Para qué tirás la primera piedra? Ahora me vas a dejar con la incógnita. ¿O me lo contarás alguna vez?
Lubelita,
Mi amigo Fran estuvo esta semana en Uruguay. En cuanto hable con él te llamo y te aviso.
Yo también te quier mucho.
es cierto la música nos trae recuerdos..alegres cómo cuando imitaba a Rafaela Carrá,nostálgicos con Serrat,mis 20 años con Soda,una canción q me llena los ojos de lágrimas"Una escalera al cielo",Silvio Rodriguez...y me despido con el carnavAl carioca para mantener el ánimo bien arriba.Te saludo.
Sí Patricia, es verdad, somos muy parecidas en ese aspecto. Yo he posteado sobre los olores, los lugares, la música, etc. Debemos ser dos melancólicas que cualquier excusa es buena para recordar. Ja, ja.
Dispersa,
Te imagino imitando a Rafaela Carrá y ya me causa gracia.
Lo mío era peor, porque vapuleaba una pobre guitarra criolla al grito de "Alma, si tanto te han herido...", que mi santo abuelo adoraba escuchar. En cuanto a Serrat y a Silvio, los adoro. Además de otros cuantos...
Me prendo al carnaval carioca. Si querés, tengo algunas matracas.
Incondicional,
Sí, evidentemente somos melancólicas. A mí me gusta mucho recordar. Siempre discuto con mi hermano porque parecería que no tiene pasado, y sostiene que hay que mirar SOLO para adelante. Yo coincido en esto último, pero creo que lo pasado hace a nuestra historia y es lo que nos hace ser lo que somos ahora. De ahí a vivir en el pasado hay un tranco muy grande.
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