sábado, 19 de enero de 2008

Salchichas con Chucrut

Me invitaron a pasar el fin de semana a Villa Gral. Belgrano. Como muy ocupada que digamos no estaba, accedí.
Luego de recorrer maravillados el camino que bordea el Dique de los Molinos llegamos a esta hermosa ciudad cerrana.
Estamos parando en una posada a una cuadra de la calle principal. Las habitaciones son pocas e inmensas, el parque es envidiable, y la pileta no es muy grande pero alcanza de sobra para sacarse el calor del sol.
Ayer estuvimos recorriendo la calle principal. A los hombres no les interesará demasiado, pero a las mujeres les cuento que la ropa y los zapatos son bellísimos. Hay muchos negocios exclusivos. No pude con mi genio y a falta de 1 me compré 2 pares de zapatos. También hay millones de negocios que se ocupan de vender cerámicas, en especial chops para cerveza. Hay algunos preciosos. También venden mates, tazas, ceniceros y demás adornos. En otro rubro están las fábricas de cerveza con visitas guiadas y los chacinados: jamones, lomitos, bondiolas, y los infaltables alfajores.
Después de la cena volvimos a la posada porque en el predio lindante cantaba Mercedes Sosa. Sentados detrás de la ligustrina que separa los lotes nos sentamos en cómodas reposeras a ver borrosamente a La Negra. Parecíamos los adolescentes que se escabullían para ver de colado las películas de los autocines (cuando todavía existían). Para ser un espectáculo gratuito (para nosotros) no nos podemos quejar: no lo habremos visto bien, pero escuchamos fenómeno (lo hubiéramos escuchado de todos modos. Era imposible no hacerlo).
Esta mañana fuimos hasta Los Reartes, donde hay una capilla jesuítica de 1738 pequeña y muy bonita. Un poco más allá había una pulpería de vaya a saber cuándo que había detenido el tiempo 100 años atrás. Sus paredes de ladrillo rústico, su piso de madera, el mostrador típico, los estantes con botellas detrás. Unos paisanos sentados a una mesa tomando grapa completaban el paisaje que parecía un almanaque de Molina Campos.
Lo que se dice acción, allí no lo encontrarán, pero fue un hermoso paseo por la historia de nuestro país.
Esto ya está pareciendo un diario de viajes, pero me gusta compartir estas experiencias. Además, como soy la única que no duerme la siesta aprovecho este rato.
Vine con la idea de descansar, y hasta de aburrirme un poco. Pero, la verdad, ¡¡no quiero volver!!

4 comentarios:

La Incondicional dijo...

Qué buenas vacaciones, te las tenés merecidas!!

dispersa dijo...

las fábricas de cerveza y los chacinados: jamones, lomitos, bondiolas, y los infaltables alfajores...
Retiro mis palabras anteriores,asi de cambiante soy,¡¡q rico!!te leía y pensaba "mala mala" ja ja.Q aventura escuchar un recital asi..se te perdona tu deseo de no volver siempre y cuando NO DUERMAS SIESTA,un abrazo.

Patricia "La Gata Flora" dijo...

Incondicional,
Venía con la idea de descansar y leer, pero estoy de reunión en reunión. Y no sé si me lo merecía, pero sí me hacía falta.
Es bárbaro lo que se consigue con buena onda.
Besos

Patricia "La Gata Flora" dijo...

Dispersa,
La última noche ya no me animé a las salchichas con chucrut, y las cambié por un pollito grillé. Tampoco es cuestión.
En cuanto al recital, tuvo otro sabor: parecía una travesura.
Y no voy a caer en los brazos de Morfeo a estas horas, por más ojitos que me haga.
Te mando un beso